Taupatías: qué son y cómo afectan a la salud cerebral
Las taupatías son un grupo de enfermedades neurodegenerativas en las que una proteína del cerebro, llamada tau, sufre cambios anormales que afectan al funcionamiento de las neuronas. Estos trastornos pueden alterar la memoria, el lenguaje, el movimiento y el comportamiento, impactando de manera significativa en la vida de quienes los padecen y de las personas de su entorno.
Comprender qué ocurre con la proteína tau y cómo se relaciona con enfermedades como el Alzheimer ayuda a visibilizar mejor estos problemas y los esfuerzos que se están haciendo para tratarlos. Vamos a adentrarnos en el tema de la mano del Dr. Oriol Grau Rivera, desde su experiencia como investigador del BarcelonaBeta Brain Research Center y neurólogo del Hospital del Mar.
¿Qué es la proteína tau y por qué es importante?
La proteína tau tiene una función fundamental en el cerebro: ayuda a mantener estables los microtúbulos, unas estructuras diminutas que permiten que los nutrientes y la información circulen dentro de la neurona. Cuando la tau pierde su forma normal y se acumula de manera anómala, estos microtúbulos se rompen, dificultando el transporte interno y afectando la comunicación entre neuronas, Es como si una carretera llena de baches interrumpiera el tráfico: la información ya no puede moverse de manera fluida. Además, debido a la tendencia de estas proteínas tau anómalas a acumularse en las neuronas, se altera su función y llega a causar su muerte.
Taupatías: un grupo de enfermedades cerebrales
Las taupatías no son una enfermedad única, sino un conjunto de trastornos que comparten la acumulación patológica de tau. Algunas de las más conocidas son:
- Enfermedad de Alzheimer. Es la más frecuente y afecta tanto a la memoria como a otras capacidades cognitivas y, con su progresión, a la funcionalidad y la conducta. Otra particularidad es que, en el Alzheimer, y a diferencia de otras taupatías, además de tau, se acumula la proteína beta-amiloide, conformando así el sello neuropatológico principalmente característico de esta enfermedad.
- Parálisis supranuclear progresiva. Esta enfermedad suele producir problemas de equilibrio, movimientos oculares y rigidez, combinados con deterioro cognitivo.
- Degeneración corticobasal. En este caso se da una combinación de síntomas motores y cognitivos.
- Demencia frontotemporal. También está asociada a la tau. Esta enfermedad está caracterizada por cambios de comportamiento, lenguaje y personalidad.
Aunque cada una tiene manifestaciones específicas, todas comparten el mismo origen molecular: la alteración de tau. No obstante, es frecuente que las personas con estas enfermedades presenten síntomas combinados, a veces desde el inicio, pero especialmente conforme la patología avanza.
Por ejemplo, personas con parálisis supranuclear progresiva o degeneración corticobasal pueden desarrollar también síntomas conductuales, mientras que personas con demencia frontotemporal pueden desarrollar, además de los síntomas cognitivos, síntomas motores. Esto puede dificultar el diagnóstico, sobre todo en fases iniciales.
Las taupatías: síntomas variables
Los síntomas de una taupatía son muy variables y dependen del tipo concreto, pero suelen incluir:
- Alteraciones cognitivas, tales como pérdida de memoria, desorganización o dificultad en el lenguaje.
- Problemas motores, por ejemplo, lentitud, rigidez, trastorno de la marcha, caídas frecuentes o aparición de movimientos anormales.
- Cambios conductuales y emocionales que afectan a las relaciones personales y a la autonomía.
Identificar las señales de manera temprana es clave para iniciar un abordaje adecuado y mejorar la calidad de vida.
Mecanismo de daño en el sistema nervioso en las taupatías
Cuando la tau se modifica de forma anormal, además de perder su función fisiológica, empieza a acumularse dentro de las neuronas formando “ovillos neurofibrilares”. Estas estructuras dañan la célula y terminan provocando su muerte. Con el tiempo, las áreas cerebrales afectadas reducen su actividad y se debilitan, lo que explica la progresión de los síntomas. Este proceso no ocurre de la misma manera en todas las taupatías, pero siempre supone un deterioro progresivo del sistema nervioso.
Tratamiento de las taupatías
No existe un tratamiento específico para las taupatías, con la excepción de la enfermedad de Alzheimer, para la cual disponemos de tratamientos sintomáticos y de terapias antiamiloide capaces de frenar el curso de la enfermedad, aunque, al momento de la redacción de estas líneas, estas últimas todavía no están disponibles en nuestro país. Actualmente, los tratamientos se centran en el control de los síntomas, por lo que el abordaje terapéutico dependerá de los síntomas predominantes en cada persona.
A continuación, se resumen algunas de las estrategias utilizadas para tratar los síntomas más frecuentes de las taupatías.
Síntomas motores
A excepción de las personas con Alzheimer, es común que quienes padecen otras taupatías presenten síntomas motores, especialmente en la parálisis supranuclear progresiva y en la degeneración corticobasal. Algunos de estos síntomas son similares a los observados en la enfermedad de Parkinson, por lo que en ocasiones se emplean los mismos tratamientos, como la levodopa.
Estos tratamientos pueden mejorar los síntomas de forma transitoria, aunque la respuesta suele ser menos efectiva que en el Parkinson. La fisioterapia también puede resultar útil para el manejo de los síntomas motores. Asimismo, algunos pacientes pueden presentar movimientos involuntarios rápidos, denominados mioclonías, que pueden aliviarse con fármacos antiepilépticos.
Lenguaje
Las alteraciones del lenguaje son frecuentes y pueden manifestarse en fases iniciales en pacientes con parálisis supranuclear progresiva, degeneración corticobasal o demencia frontotemporal. En estos casos, se recomienda valorar la intervención de un logopeda para establecer un tratamiento adecuado.
Síntomas conductuales
Son característicos de la demencia frontotemporal, aunque también pueden aparecer en otros tipos de taupatías. El tratamiento inicial de elección suele ser con antidepresivos del tipo inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina. En casos más graves, puede estar indicado el uso de antipsicóticos. Como norma general, ante la presencia de síntomas conductuales, debe priorizarse siempre el empleo de intervenciones no farmacológicas, solas o combinadas con tratamiento farmacológico. Hay que valorar siempre el uso preferente y combinado de estrategias no farmacológicas.
Avances en investigación en relación con la proteína tau
Aunque no existe ningún tratamiento aprobado específico para las taupatías, en los últimos años, se han intensificado las investigaciones para frenar la acumulación de tau y tratar las taupatías. Actualmente, hay 170 fármacos en distintas fases de desarrollo para tratar las taupatías.
Existen varias líneas prometedoras:
- Inmunoterapias que buscan estimular al sistema inmunitario para que elimine la tau patológica.
- Fármacos en desarrollo que intentan estabilizar la proteína, impedir que se agregue o evitar su expresión.
- Biomarcadores en sangre o líquido cefalorraquídeo que podrían permitir diagnósticos más tempranos y específicos.
Aunque no existe una cura, la comunidad científica avanza en la comprensión de estos mecanismos, lo que abre la puerta a futuros tratamientos más eficaces.
El reto médico y social de las taupatías
Las taupatías representan un reto médico y social de gran magnitud, ya que afectan a la cognición, el movimiento y la conducta de las personas que viven con una enfermedad de este tipo. Estas enfermedades no solo alteran las funciones neurológicas de quienes las padecen, sino que también transforman su vida cotidiana y la de su entorno más cercano. El impacto es físico, emocional, financiero y social, lo que requiere un enfoque integral que contemple la atención médica especializada y el acompañamiento humano.
El abordaje de las taupatías implica atender múltiples necesidades: diagnóstico preciso, tratamientos personalizados, estrategias de rehabilitación y apoyo psicológico tanto para las personas afectadas como para quienes se encargan de su cuidado. Las personas cuidadoras suelen enfrentarse al agotamiento emocional y a la sobrecarga de responsabilidades, por lo que contar con redes de apoyo y recursos sociosanitarios adecuados resulta esencial.
Conocer qué es la proteína tau y cómo su alteración da lugar a distintas enfermedades ayuda a poner en valor la importancia de la investigación y el diagnóstico temprano. Mantenernos informados y sensibilizados es un primer paso fundamental para apoyar a quienes viven con estas enfermedades y promover los avances científicos que buscan aliviar sus efectos.
Referencias
- Harris, G. A., Hirschfeld, L. R., Gonzalez, M. I., Pritchard, M. C., & May, P. C. (2025). Revisiting the therapeutic landscape of tauopathies: assessing the current pipeline and clinical trials. Alzheimer's research & therapy, 17(1), 129. https://doi.org/10.1186/s13195-025-01775-x
- Olfati, N., Shoeibi, A., & Litvan, I. (2022). Clinical Spectrum of Tauopathies. Frontiers in neurology, 13, 944806. https://doi.org/10.3389/fneur.2022.944806
- Samudra, N., Lane-Donovan, C., VandeVrede, L., & Boxer, A. L. (2023). Tau pathology in neurodegenerative disease: disease mechanisms and therapeutic avenues. The Journal of clinical investigation, 133(12), e168553. https://doi.org/10.1172/JCI168553
- VandeVrede, L., Ljubenkov, P. A., Rojas, J. C., Welch, A. E., & Boxer, A. L. (2020). Four-Repeat Tauopathies: Current Management and Future Treatments. Neurotherapeutics : the journal of the American Society for Experimental NeuroTherapeutics, 17(4), 1563–1581. https://doi.org/10.1007/s13311-020-00888-5
También te puede interesar
Artículos relacionados

Variantes de la enfermedad de Alzheimer o Alzheimer atípico

El cerebro de una persona con Alzheimer: cambios, áreas afectadas y su impacto

