Recomendaciones para evitar que el nivel de ruido altere el bienestar de las personas con Alzheimer
A continuación, mencionamos algunas recomendaciones que pueden ayudar a crear un ambiente tranquilo y relajado para las personas con Alzheimer.
- La música puede inducir a la relajación o resultar estimulante. A menudo, la música conocida y personalmente significativa es un buen aliado para favorecer la expresividad de las personas con Alzheimer.
- Favorecer la exposición a sonidos de la naturaleza. Si la ventana de su habitación o del salón da a una zona tranquila, puede ser interesante dejarla abierta en determinados momentos del día. Otra posibilidad es salir a dar un paseo por un parque, por el campo u otra zona tranquila.
- Evitar la exposición a niveles altos de ruido que le puedan resultar molestos, especialmente en el hogar. Procurar un buen aislamiento acústico con ventanas adecuadas en caso de que haya mucho ruido exterior, regular el volumen del televisor y apagarlo cuando no se esté viendo, minimizar ruidos bruscos como el de ciertos electrodomésticos, alarmas, timbres, etc.
- Procurar la creación de espacios silenciosos, especialmente durante las comidas o en momentos destinados a alguna otra actividad en particular.
Algunas celebraciones como las verbenas o fiestas mayores pueden afectar negativamente a las personas con Alzheimer por caracterizarse por altos niveles de ruido. El ruido producido por música muy alta y por el bullicio de gente, y especialmente por la pirotecnia puede asustar o confundir a las personas con Alzheimer u otras formas de demencia.
Para minimizar el estrés que pueden causar estas festividades es importante informar con cierta antelación (pero no excesiva) a la persona con Alzheimer de que se acercan. Hablar de las características y motivos de la festividad en cuestión puede ser también una forma de reminiscencia que tal vez le traiga recuerdos agradables de su infancia o juventud, además de favorecer la orientación temporal. Aun así, es importante procurar minimizar la exposición a altos niveles de ruido para evitar su incomodidad o incluso que se puedan desencadenar alteraciones conductuales.
Controlar el nivel de ruido ambiental es una estrategia que puede favorecer el bienestar de las personas con Alzheimer. Cuidar el entorno sonoro puede ser beneficioso tanto emocional como cognitivamente. No obstante, es necesaria más investigación acerca de cómo afectan los factores ambientales como el ruido a las personas con Alzheimer.